12 buenas prácticas de educación financiera digital

 

La falta de conocimientos financieros y el desconocimiento de las tecnologías digitales pueden conducir cada vez más a la vulnerabilidad financiera y a la exclusión de los consumidores. “Sin los conocimientos financieros digitales adecuados y la capacidad de garantizar su ciberseguridad, los consumidores corren un mayor riesgo de convertirse en víctimas de estafas y fraudes”, advierten las tres Autoridades Europeas de Supervisión (EBA, EIOPA y ESMA), que acaban de hacer público un informe temático conjunto sobre las iniciativas nacionales de educación financiera en materia de digitalización, centrado en la ciberseguridad, las estafas y el fraude.

Fuente: future.inese.es

En total, se han seleccionado 12 buenas prácticas que, en opinión de los supervisores, pueden ayudar a las autoridades nacionales y a otras entidades públicas a aumentar el alcance y la eficacia de sus iniciativas de educación financiera y contribuir así a mejorar la alfabetización financiera digital de los consumidores. Entre otras, se considera buena práctica:

  • Publicar una lista negra de proveedores fraudulentos para ayudar a los consumidores con conocimientos digitales a evaluar adecuadamente los riesgos financieros derivados de los productos y servicios financieros vinculados a las nuevas tecnologías, como los criptoactivos.
  • Llegar a los consumidores con aversión a la tecnología no solo a través de canales digitales, sino también no digitales, y enseñarles a utilizar las herramientas digitales para acceder a los servicios financieros de forma segura.
  • Colaborar estrechamente con los profesores para comprender sus necesidades educativas específicas, así como ayudarles a desarrollar y probar material educativo adecuado, de modo que puedan servir de multiplicadores de la educación financiera de los estudiantes.
  • Presentar adecuadamente las iniciativas de educación financiera para aumentar su alcance, por ejemplo, incluyendo elementos de entretenimiento, como juegos.
  • Aplicar la optimización de motores de búsqueda para garantizar que los sitios web de educación financiera de las autoridades nacionales aparezcan entre los primeros resultados de búsqueda cuando los consumidores busquen información sobre temas financieros específicos.